sábado, 1 de agosto de 2009

¿CUESTA TANTO RESPETAR LAS COSTUMBRES, HÁBITOS U ORTODOXIA?





Repasando algunas fotos he encontrado estos curiosos ejemplos de lo que, desde mi modesto punto de vista, son claros síntomas de una falta de respeto a las costumbres, hábitos, ortodoxia, tradición o como queramos llamarlo.

Casos como el peón con zapatillas (Festival de Almedinilla de mayo de 2008); otro sin castañeta ni coleta (igualmente Almedinilla, septiembre de 2008), o el reciente bochorno del vehículo "todo terreno" sustituyendo a las mulillas en la señorial plaza de Cabra, son manifiestos casos de una falta total y absoluta de respeto a una normas y costumbres establecidas durante siglos y que deberían de cumplirse, a mi modo de ver, a rajatabla, ya que si son los propios protagonistas de la Fiesta los que se las saltan a la torera, nunca mejor dicho, ¡apaga y vámonos!.

3 comentarios:

Córdoba Taurina dijo...

Rafa esto está así por culpa de todos, pero especialmente de los profesionales. Un matador no debe de permitir esas cosas entre la gente de su cuadrilla. Tampoco una empresa no puede prescindir de un tiro de mulas. Esto debe de ser tan sancionable como otra falta cualquiera.
Sabes de mi condición de cofrade y si el día de la procesión un nazareno se presenta vestido como le da la gana, o se viste bien o no sale. Al menos en otros sitios se respeta la liturgia.

Unknown dijo...

Pero si para solucionar ésto la cosa es mi fácil, que el presidente aplique el reglamento que todas estas cosas que habéis apuntado todas están perfectamente reglamentadas.
Hasta lo del tiro de mulillas.
Aquí o seguimos respetando a la fiesta o dentro de poco tendremos que asistir a su entierro.
Que Dios no lo quiera.

RAFAEL COBO dijo...

Juan Antonio, desconozco si el Reglamento dice algo al respecto de estos tres ejemplos. Creo que en los dos primeros, deberían se el matador el que no permitiera semejantes situaciones.
Lo de las mulillas tampoco creo que esté legislado. No encuentro nada el respecto en la legislación actual. Desde mi modesto punto de vista creo que es más un aspecto tradicional o una reminiscencia de otras épocas en la Fiesta, lo mismo que en Madrid siempre salen dos tiros en recuerdo del que retiraba a los caballos heridos en el segundo tercio.